BUENOS AIRES – CAPITAL FEDERAL – Más de un centenar de misioneros, muchos de ellos universitarios, aguardaron impacientes, durante toda la madrugada de este sábado y frente a la Casa de Misiones en Buenos Aires, los colectivos que prometió el Gobierno de la Renovación para traerlos a votar. El oficialismo había promovido el «tour electoral», sin costo para los beneficiarios, y con el único compromiso que los misioneros «cumplan» con su deber cívico de votar. Pero al parecer se quedaron cortos de colectivos, y la bronca de los convocados llegó hasta el despacho de la Vice y candidata a senadora, Sandra Giménez.
MISIONES – POSADAS – La vicegobernadora Sandra Giménez, candidata a senadora por el kirchnerista Frente Renovador, bramaba de impotencia el viernes por la noche, cuando se enteró que más de un centenar de misioneros estaban varados en la Casa de Misiones, esperando los colectivos que el gobierno provincial les había prometido para venir a votar.
Las informaciones que llegan desde Capital Federal no son muy halagadoras para los estrategas del oficialismo, que armaron una movilización que ofrecía venir desde Buenos Aires a Misiones y regresar la misma noche de mañana domingo, sin costo alguno, y bajo responsabilidad del Gobierno de Maurice Closs.
Pero el viernes por la tarde, la cola de espera llegaba a más de una cuadra en la sede céntrica de la Casa de Misiones, donde más de un centenar de jóvenes esperaban recibir las promesas de ser parte del tour electoral que les ofreció la gente de la Vicegobernadora, sin costo alguno.
Según se pudo comunicar M4 con varios pasajeros en espera, el Gobierno provincial se quedó corto con los colectivos de larga distancia que contrató a las empresas Singer y Crucero, principalmente; además de no haber llevado un registro adecuado de la cantidad de comprovincianos que querían aprovechar el traslado sin costos a la tierra colorada.
Como sea, en la madrugada de éste sábado, decenas de personas –la mayoría de ellos chicos universitarios del Centro de Estudiantes Misioneros en Capital Federal- se agolpaban en las puertas de acceso a la Casa de Misiones, para saber sin el Gobierno cumpliría con su palabra de traerlos a votar, con él único requisito de que cumplan con las obligaciones cívicas.
Fuente: Misionescuatro